viernes, 7 de diciembre de 2012

La familia y su relación con la delincuencia


La familia es la base de nuestro crecimiento, es el lugar donde los principios y los valores se fomentan, donde se satisfacen las necesidades básicas y secundarias que todo ser humano requiere. Dichas necesidades son fundamentales cubrir para que el adolescente alcance un desarrollo integral en cuerpo, mente y espíritu, de ahí la importancia que tiene.  


Cuando la familia se desintegra los adolescentes tratan de buscar un lugar de aceptación y cariño en donde ya no existe. Justo en este momento empiezan a revelarse, por lo que empiezan a agruparse con otros adolescentes en las mismas condiciones formando pandillas o bandas donde empiezan a delinquir en cualquiera de sus manifestaciones. Esta delincuencia es una forma de manifestarse inconformes con la situación en la que se encuentran y es un problema social de importancia relevante en nuestro país.

Adolescentes delincuentes con trastornos antisociales de la personalidad


Se trata de menores cuyas principales características son: la hiperactividad, excitabilidad, ausencia de sentimiento de culpa, ira con las personas, fracaso escolar y poco o nada comunicativos. Una de las principales causa de este trastorno es la ausencia o la figura distorsionada de la madre, aunque tampoco ha de infravalorarse la disfuncionalidad del rol paterno, pues según algunos trabajos, el crecer sin padre acarrea al niño nocivas consecuencias que afectan al campo de la delincuencia. En muchos casos se trata de menores que viven en las calles, en situación de permanente abandono, nos encontramos con menores que a su edad, acumulan graves frustraciones, rencores y cólera contra la sociedad, y que desencadenan un mismo denominador común: el desamor, la falta de comprensión y de cariño, así como de atención y cuidado de sus padres. En definitiva, son jóvenes con una desviada socialización primaria que acaba por abocarles a la delincuencia.

Delincuencia Juvenil

La delincuencia juvenil es un hecho que hoy en día está sobresaliendo con mayor fuerza en todos los países. Su prevención es esencial para disminuir el delito en la sociedad. De este modo, podemos destacar, entre los factores indicados que los más importantes en la fase criminológica son: el ambiente familiar en el que predomina la amoralidad, la pobreza y la deserción escolar. Por lo que podemos mencionar que la gran mayoría de los jóvenes de bajos recursos no culminan el ciclo escolar, siendo así, muchos de ellos apoyados por su madre quien en la mayoría de los casos es la figura que representa el rol de madre y padre, siendo el sostén del hogar y asumiendo la responsabilidad de este. La ausencia de fuentes de trabajo, las malas compañías son causas que orientan e incentivan a cometer actos delictivos.


En virtud a que los menores tienden a trabajar por las necesidades económicas y no por una formación o crecimiento profesional, esto lo puede conllevar a ejercer trabajos que en ocasiones pueden ser denigrantes, conllevando a generar una frustración del joven que a futuro se convierte en un factor que lo involucra a realizar actos ilícitos.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Principales figuras de la historia de la Psicología Clínica

El Mundo Antiguo
 

Hipócrates (460-377 antes de Cristo). Fue un médico griego que estaba convencido de que la enfermedad mental era el resultado de causas naturales y patológicas cerebrales, y no de los demonios o dioses.
 
 
Platón (429-347 antes de Cristo). Fue un filósofo griego que creía que los pacientes mentales deberían ser tratados de manera humanitaria, y no debían ser considerados responsables de sus actos.
 
 
 
Aristóteles (384-322 antes de Cristo). Fue filósofo griego y discípulo de Platón. Seguidor de la teoría de Hipócrates de que las causas de los trastornos mentales eran diversos humores del cuerpo que estaban desequilibrados. Aristóteles rechazo la idea de que los factores psicológicos pudieran ser la causa de los trastornos mentales.
 
Galeno (130-200 antes de Cristo). Medico griego y seguidor de la tradición de Hipócrates, que contribuyo en gran medida a la compresión del sistema nervioso. Galeno dividió las causas de los trastornos mentales en dos categorías, una física y otra mental.   

miércoles, 31 de octubre de 2012

Reflexión del día


La delincuencia en Panamá


Desde hace un par de años atrás en Panamá han surgido conductas des adaptadas para la sociedad en los niños, jóvenes y adolescentes, y es que la delincuencia ha ido incrementándose en los últimos años. Podemos hacernos una pregunta ¿Qué factores determinarían las conductas delictivas en Panamá? Podríamos mencionar antes que nada el factor económico: como la canasta básica encarecida, el salario mínimo que no alcanza para la cantidad de pagos que se tienen que cubrir como: el agua, la luz, la vivienda, el teléfono, la comida, la ropa, la escuela, la universidad, el transporte entre otros. Estos serían algunos de los factores que generan la conducta delictiva. Sin embargo, existen padres de familias que salen a diario buscando lo mejor para sus hijos, para brindarles una buena educación, prepararlos para que sean buenos profesionales. Por lo tanto, podemos decir que los niños, jóvenes y adolescentes que son propensos a las necesidades y deseos de los objetos de sus compañeros anhelan que sus padres con pocos ingresos económicos se los compren. Por ejemplo: ellos ven a sus compañeros de la escuela con cualquier tipo de objeto que desean, van donde sus padres a pedírselos y estos les dicen que no, que solo cuentan con los ingresos para cubrir las necesidades básicas. Sin embargo es más fuerte la necesidad de desear algo para esto jóvenes, ya sea dinero, ropa, zapatillas de marcas entre otros; o veamos otro escenario, ayudar a sus padre a quienes ven sufriendo por los pocos recursos que lograr adquirir y solo les alcanza para pagar ciertas cuentas. En algunos casos ellos salen a las calles a buscar cualquier tipo de trabajo, pero lamentablemente existe una ley que no permite que los menores de edad trabajen hasta cumplir cierta edad y el con el consentimiento de los padres, muchos los hacen sin el consentimiento de ellos. Estos jóvenes en ciertos casos están educados con valores y principios, y se encuentran con aquello que nunca les fueron enseñados o pudieron adquirir una buena base educacional en casa. Por lo tanto, aquellos que están más vulnerable a las necesidades observan aquellos que poseen todo lo que un niño, joven y adolescente desearía tener. Un escenario sencillo en el barrio: llega el niño inocente donde sus compañeritos preguntándole como se compró esas zapatillas de marcas, ropa o teléfono, y es aquí donde se fusiona las dos partes y crean el vínculo delictivo. Le comenta que roban en las plazas a las personas que pasan, le arrebatan su cartera y entre otros objetos personales. Qué manera tan fácil de adquirir objetos deseados, y es donde inicia la conducta delictiva por la necesidad de querer un objeto. El hurto no es una actividad individual y aislada, sino es algo que se aprende en contacto con otras personas.

También podríamos mencionar que los padres jóvenes (menores de edad) que no tiene la suficiente madures cognitiva de educar a un niño, podría ser otro factor que genere la conducta delictiva, padres que no se preocupan por el bienestar de sus hijos, que los dejan abandonados, abuelos que crían a sus nietos cuando ya no cuentan con la misma fuerza de antes, sin el apoyo del padre o la madre, falta de respeto a las autoridades. Triste y lamentable la situación que se ve en un país y el ejemplo que se le da a futuras generación. ¿Que podríamos hacer?